lunes, 27 de agosto de 2007

Tracción animal

La carga es de toneladas, y reposa sobre un carro inmóvil, que espera a ser empujado. Y quién mejor que yo para llevar mis propios problemas, pesadumbres y excesos de responsabilidad. Como una mula de carga, dispuesta a subir la pendiente, comienzo a dar pasos pesados y dolorosos. Mis piernas no son tan fuertes como lo creí alguna vez. De fondo suena notas de dolor. "Todos hieren alguna vez", susurran a mi oído. Y no puedo dejarme ir, porque arrastro todo lo que soy. No puedo huir de nuevo.

Creo ciegamente en que existe un punto de llegada.

1 comentario:

Ilca dijo...

Yo paso para decirte... que sí, efectivamente somos animales pensantes, tanto que aveces escogemos cargar y cargar por que la inteleigencia inmersa en las habilidades nos da ese boleto, sin embargo el viaje se puede hacer pesaroso por que excedemos nuestra capacidad, estamos hechos de carne, eso soporta nuestras habilidades, de ello depende, se resiente nuestro cuerpo. Solo puedo decir desde lo que ignoro y guardandote el respeto que te tengo, ese sentimiento que esta seguro en un lugar dificil de maltratar...descansa... has dado mucho, yo haré lo mismo...descansar.