Mientras llueve en algún lugar del mundo
Al leerte, te escucho, como si murmuraras dulces palabras a mí oído. Al escucharte, puedo verte, de frente, a los ojos, como una aparición. Me pregunto día a día, cómo sería tocarte, y verte, y sentirte.
Llueve y sigue lloviendo. Y no puedo ver las gotas que cubren tu cuerpo. Pero sueño y sigo soñando. Y me aferro a mi infantil creencia en el destino. Porque sé que existes, y pronto serás para mí. Tan cerca. Tan cerca.
¿Por qué simplemente no puedes estar aquí conmigo?
3 comentarios:
No vamos a extraviar el tiempo… lo vamos a enredar con artificios nacidos de la piel misma… artificios nacidos de las manos entrelazadas, de las pupilas dilatadas, para que vuele el alma....
llueve....
no, podemos vivir instantes eternos
sobre rocas de fuego y ligeramente percibir como se nos derriten las piernas de hielo...
si, podremos esperar a que llueva hacia arriba mientras vemos emerger de la tierra manos neuróticas sedientas de cielo!!!
-En Manizales, Todo Pasa y Nada Pasa-
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